sábado, 18 de agosto de 2012

El Arsenal FC pierde dos pilares.

Durante la semana se hizo un hecho el traspaso de la figura y capitán del conjunto de Wegner, Robin van Persie. El mismo jugador que tras renovar su contrato a mediados de 2009 dijo que “no se podría imaginar con otra camiseta que no sea la del Arsenal”, fue transferido por la abultada suma de 22.5 millones de Libras [28.5 millones de Euros] a otro de los grandes de Inglaterra, nada más y nada menos que al Manchester United. Sin dudas, este fue uno de los traspasos más relevantes del mercado de verano europeo, que inesperadamente, no trajo mayores sorpresas por los siempre grandes protagonistas, siendo estos el Manchester City o el Real Madrid. Repasando brevemente algunas de las transferencias más destacadas, sobresalen la de Ibrahimovic y Thiago Silva desde el Milan al PSG, la del joven brasilero Oscar, desde el Internacional de Porto Alegre al Chelsea, sumándose a la llegada de Eden Hazard, o porqué no, las transferencias de Santi Cazorla, Oliver Giroud y Lukas Podolski al Arsenal mismo.


Sin dudas, la venta de van Persie no ha sido un trago fácil para el técnico francés, ya que, durante estas últimas temporadas y tras la salida de Henry y Adebayor, el delantero holandés había quedado como el único referente de ataque, convirtiéndose en el goleador del equipo, siendo tan importante su actuación, que sin sus goles, el conjunto Gunner hubiera terminado 10 lugares por detrás en la última English Premier League. Lo que más sorprende, es el destino que ha tomado el jugador, ya que, a pesar de que su salida era inminente, nadie imaginaba que Robin partiría a un club del mismo país, y menos a uno de los eternos clásicos del United. Ahora, el conjunto de Ferguson posee una de las ofensivas más poderosas de todo Europa, contando con nada más y nada menos que Wayne Rooney, Danny Welbeck, Chicharito Hernández, Ashley Young, Nani, y ahora, van Persie.

Pero en las últimas horas, la fanaticada del Highbury ha recibido otro duro golpe. Uno de los líderes del medio campo, y el máximo asistidor de la temporada pasada con 14 asistencias, Alexandre Song, ha sido transferido al FC Barcelona, para reforzar ese mediocampo que tantas alegrías le ha traído a la afición Culé. El supuesto sucesor de Cesc Fàbregas en el mediocampo Gunner, ahora será compañero del mismo, dejándole este puesto al joven Jack Wilshere, que todavía se recupera de una lesión, y al español Mikel Arteta. La transferencia fue confirmada esta mañana, antes del encuentro que disputó el Arsenal frente al Sunderland. El valor del pase fue de 19 millones de Euros, con una importante cláusula de 80 millones de Euros, siendo esta una gran apuesta para el club azulgrana.


Ahora la pregunta que está en la cabeza en todos los fanáticos del Arsenal es, si serán capaces de pelear por la Liga, o en su defecto clasificar para la Champions League, a pesar de estas dos importantes salidas. El otro punto en cuestión, es si las incorporaciones mencionadas anteriormente serán suficientes para cubrir esta salida, o si los directivos deberán hacer un rápido movimiento, para intentar reforzar más estas zonas. Lo que se sabe, es que la identidad de juego no se pierde y Wenger, a pesar de los jugadores que se vayan, continuará con su clásica manera de jugar, tratando de explayar un fútbol lindo y vistoso, aunque últimamente no le ha traído sus frutos.

miércoles, 15 de agosto de 2012

En Frankfurt, Argentina le ganó a Alemania con gol de Messi.

A la espera del comienzo de las nuevas temporadas en Europa, Alemania y Argentina se enfrentaban en Frankfurt, por el calendario de fechas FIFA. El último antecedente entre estas dos selecciones había sido en los 4tos de final de la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010, en donde el conjunto bávaro se impuso por 4-0.
El seleccionado local formaba con Zieler - Boateng, Hummels, Badstuber, Schmelzer - Khedira, Bender - Müller, Özil, Reus - Klose; con un esquema de 4-2-3-1. Por su parte, el seleccionado de Sabella proponía un esquema de 4-4-2, con Romero en el arco, Zabaleta, Fernández, Garay y Rojo en el fondo; Sosa, Gago, Mascherano y Di María en el medio; y adelante Messi e Higuaín, relegando al Kun Agüero.


El partido comenzó considerablemente a favor de Alemania, quien era el que manejaba el balón y trataba de acercarse al arco rival con más profundidad. Por su parte, Argentina intentaba tener la posesión del balón, pero la fuerte presión de las primeras líneas alemanas, se lo impedía. Las primeras situaciones llegaron de la mano de Klose y Özil, pero Romero actuó de una buena manera en ellas.
En el minuto 30 de la primera mitad, Messi asistía a Sosa, y este último era derribado por Zieler, el arquero alemán, dentro del área, generado así un penal para la albiceleste, y la tarjeta roja para el guarda-metas, por último recurso. El mismo Messi fue el encargado de ejecutar el penal, pero su remate era atajado por Ter Stegen, el portero recién ingresado. Todo seguía igual, salvo que ahora Argentina tenía un hombre de más.


Justo antes de que finalizara la primera mitad, llegaría lo esperado para el conjunto de Sabella, el primer tanto, pero de la manera menos esperada, siendo Khedira quien lo convertiría en propia puerta. Con el panorama totalmente distinto, ambos equipos salieron al campo en el segundo tiempo, sabiendo Alemania, que debería salir a buscar el empate, corriendo el riesgo de quedar muy expuesto en la zona defensiva.
Y fue así, como tras una muy buena jugada colectiva, y aprovechando los espacios, Higuaín logró tirar el centro atrás, para la llegada del mejor jugador del planeta, Messi. Era el 2-0 para la Argentina, liquidando, en cierta forma el encuentro, que ya pecaba por ser amistoso.


Con dos goles de desventaja, el equipo alemán bajó los brazos, y lo hizo aún más tras un bombazo de 30 metros de Di María que se incrustaba en el arco alemán. A falta de 20 minutos, la Argentina ya estaba tres goles arriba, y con chances de expandir más la ventaja. A falta de pocos minutos para el final, una gran triangulación le permitió el descuento a los alemanes, que tras el centro de Götze, apareció con una "palomita" Höwedes, dejando sin nada que hacer a Romero. 
La diferencia fue muy abultada para lo que fue el trámite del juego, viéndose Argentina beneficiada por la expulsión del arquero alemán, y la salida de Müller como consecuencia de esto.

Redacción propia.